El mejor diseño de packaging que existe de una botella de vino

Este producto entra en la sección de: lo compro solo por el empaque, no me importa si el vino que hay dentro de la botella tenga buen sabor. Son de esas cosas que compras pensando en darle un segundo uso. Yo pensé en comprar esa botella, para no abrirla y utilizarla como objeto de decoración en mi oficina.

La marca del vino es: Φ I L O S O Φ, ese nombre está inspirado en la palabra griega: Simposio. Es el nombre de las reuniones donde intelectuales y filósofos de la antigua Grecia, en donde discutían todo tipo de temas de interés. Al mismo tiempo que consumían una gran cantidad de vino.

En el papel que envuelve la botella de vino, tiene impreso el rostro de un filósofo. Es una ilustración hecha a mano en blanco y negro, que trata de imitar una escultura helénica. Sobre el rostro del pensador hay diferentes palabras impresas en tinta dorada.

Esas palabras representan las diferentes etapas que sufre una idea, desde que se desarrolla hasta que alcanza la madurez. El objetivo del diseño fue mostrar de manera visual, el pensamiento complejo de un filósofo.

El mejor packaging diseñado para una marca de vino

Cuando retiras el papel, te encuentras con una jarra hecha de cerámica. El diseño está inspirado en las antiguas jarras de arcilla utilizadas en la antigua Grecia para guardar el vino.

Son dos colores utilizados en las jarras: el blanco y el oro. El color blanco representa el alma, mientras que el color oro simboliza lo material. Porque uno de los temas preferidos por los filósofos griegos era los límites existentes entre lo materialista y lo espiritual.

En la tapa de madera de la jarra, están impresas en letras doradas tres preguntas fundamentales utilizadas durante siglos: ¿Dónde, por qué y qué?

Como te puedes dar cuenta es un diseño que cuida cada pequeño detalle de cada elemento del producto. Se nota que hubo mucho trabajo de investigación por parte de la agencia encargada del proyecto Backbone Branding, antes de comenzar a diseñar.

Por todo lo anterior es que digo que si me topo con esta botella, —la cual supongo que no será nada económica— la compraría no por el vino, lo haría solo por el diseño.

Y ahora que conozco toda la historia que hay detrás de cada uno de los elementos, me gustó aún más. Incluso el video que hicieron para presentar el diseño para el empaque del vino, se ve elegante y de buen gusto.

Este proyecto ya se convirtió en uno de mis diseños favoritos de packaging en lo que va del año.

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