¿Cómo saber si mi diseño es bueno?

reglas de diseño grafico

Evaluar una pieza de diseño puede ser tan simple y a la vez tan complejo. El diseño implica todo un proceso de creación y producción, muchas veces lleva horas de trabajo, por lo tanto, los argumentos y parámetros para llevar a cabo una evaluación deben ser muy importantes.

Por eso, las reglas básicas que les comparto deberían no dejar de ser considerados tanto por clientes, profesionales del marketing y creativos a la hora de emitir cualquier juicio de valoración sobre un diseño.

¿Cómo saber si mi diseño es bueno?
Reglas básicas para evaluar un diseño
Por iLia Juárez

Así que ya saben, hay que checar muy bien todo antes de emitir cualquier crítica constructiva, evaluación u opinión de una pieza gráfica. [Fuente: Adrián Pierini / Red Gráfica Latinoamericana]

Aquí la imagen más grande | [10 reglas]

4 comentarios en “¿Cómo saber si mi diseño es bueno?”

  1. Pingback: Cómo saber si es un buen diseño / How to know if it’s a good design | Blog de Alberto Díaz Tormo

  2. Y si la combinación de colores elegida hace que se lea fatal, como en la imagen, el diseño es nefasto =)

  3. Ilia:

    Podrías cambiar el color de las letras de azul a Blanco, porfis. Me estoy matando la vista al tratar de leerlo.
    Gracias

  4. Wilber Oswaldo Nucamendi Madrigal

    Aquí algunas observaciones de los puntos presentados:

    La estética. En realidad depende del ojo del observador, y del buen gusto. Pero lo más importante es que un buen diseño no depende de esta característica ya que la estética debe estar en completa armonía con el objetivo con el que fue creada la pieza gráfica. Generalmente un buen diseño es aquel que consigue esa armonía.

    Su historia. En realidad hablamos del contexto en que la pieza fue realizada, no puede evaluarse un diseño ni considerarse bueno o malo fuera de su contexto.

    El objetivo principal. No es conveniente evaluar si un diseño cumplió con su objetivo principal con base a un sólo criterio, pero se debe tomar en cuenta que un diseño como tal cumple su cometido cuando produce una retroalimentación, una respuesta del público frente a la pieza gráfica, de forma efectiva.

    Un diseño debe ser evaluado además en cuanto a su capacidad de ser reproducido, es decir, de cumplir con las características necesarias para el método o técnica que fue elegida para su reproducción.

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