El fotógrafo australiano Warren Keelan ha captado una serie de paisajes las cuales muestran la belleza, fuerza y curvatura de las olas antes y después de romperse. Los increíbles paisajes se forman gracias al impredecible movimiento del agua y la forma en que la luz atraviesa tanto en la superficie como por debajo.
La calidad del trabajo de Warren es tan bueno que ha llegado a ganar diferentes premios internacionales y ser considerado uno de los mejores de fotógrafos océanos y mares.
Warren Keelan nos cuenta que pasa la mayor parte de su tiempo cerca o dentro del océano, esperando poder captar la crudeza y belleza de este en fotografías. Lo que más le atrae del océano es su naturaleza cambiante, algo que ha logrado plasmar muy bien en su trabajo. La interrogativa más grande es como logra conseguir tan increíbles fotografías, estar en el momento exacto y el equipo que usa; debemos de aclarar que de cierta manera es un trabajo muy peligroso e incluso excitante, puesto que uno esta expuesto segundos previos a un impacto sin igual.
Cada ola pareciera contarnos una historia, el continuo movimiento del agua crea increíbles formas asimétricas así como patrones que parecen desaparecer en un estruendoso impacto consigo mismas.
Lo curioso de sus fotografías es que algunas son tan buenas que parecieran ser hechas de manera digital, pinturas hiperrealistas o ser esculturas de vidrio, incluso me recuerda al trabajo de Ben Young el cual ya hemos compartido anteriormente en el blog. Cada fotografía es irrepetible y atrae de manera abismal al espectador.
Por sí gustan conocer más del trabajo de Warren Keelan les compartimos su página oficial, así como su cuenta de Instagram donde podrán ver todas sus fotografías e incluso adquirir su trabajo el cual esta a la venta.
Publicado por @Tlachidito