
El día de ayer fue el Super Bowl LIV, el equipo ganador fueron los Kansas City Chiefs. Durante toda la temporada, la NFL celebró sus primeros 100 años de vida.
El día de ayer antes de comenzar el partido presentaron un emotivo video donde el protagonista es un niño que hace un rápido repaso de la historia de La National Football League. En el vídeo aparecen estadios emblemáticos, así como jugadores actuales y jugadores que están en el salón de la fama.
Como cada año, empresas de todo tipo de giro, compran espacios publicitarios para mostrar sus comerciales durante los tiempos donde no hay actividad en el partido.
En 2020, el costo por 30 segundos en la final de la NFL fue de: 5.6 millones de dólares.
En los tres últimos años, los comerciales del Super Bowl que se verán durante el partido, ya fueron vistos días antes, por millones de personas a través de YouTube.
De hecho, son más personas que ven los comerciales antes o después del partido. Ahora las marcas aprovechan para publicar su publicidad con mayor duración en sus cuentas de redes sociales.
Incluso hay distintas versiones del mismo comercial, pero las marcas solo pagan 30 segundos para presentar uno de los comerciales.
5.6 millones de dólares por 30 minutos de tiempo aire
Muchos de estos comerciales llegan a ser virales en redes sociales, provocando que el comercial sea visto por millones de personas. Eso ocurrió con el comercial de Jeep donde aparece el actor Bill Murray.
Me da la sensación de que hay más personas mirando los comerciales, que fanáticos del fútbol americano que miran el Super Bowl. Hay comerciales que son muy esperados como por ejemplo el de los aguacates de México, los de Pepsi, Doritos, Microsoft, entre otros.
Pero también hay algunos comerciales que no gustaron nada, como por ejemplo uno de Donald Trump que hizo para promocionar su campaña electoral. Ese comercial, por supuesto, no está en la lista de los mejores comerciales.